Video de Cabañas en Esteros del Iberá
Con una extensión de 1.400.000 hectáreas, los Esteros del Iberá, son el segundo Humedal más grande de Sudamérica. Antiguos cauces, o lechos abandonados del Río Paraná formaron, con el paso del tiempo, esta independiente y compleja red de humedales compuestas por bañados, esteros, lagunas, embalsados y cursos de origen pluvial.
Los esteros de este sistema son un depósito de agua estancada con una profundidad que varía entre uno y tres metros cubierto por dos tipos de plantas acuáticas: las que surgen desde el fondo formando pajonales en los bordes costeros o las formaciones flotantes que tapan la superficie del agua como los camalotes y embalsados estos últimos, en algunos casos, toman un espesor considerable.
Los Esteros del Iberá mantienen estable su nivel por la capacidad de retener agua de lluvia gracias a la gran cantidad de vegetación del lugar. Según las mediciones, las precipitaciones pluviales, que anualmente oscilan entre 1200 y 1500 Mm., devuelven al sistema una cantidad de líquido equivalente a la que se evapora. Del agua recibida, un poco menos de la cuarta parte deriva hacia el río Paraná, a través del río Corrientes, único desagüe superficial del sistema.
El gobierno de la Provincia de Corrientes creó la Reserva Natural de Iberá el 15 de abril de 1983 por ley 3771. Hasta ese tiempo mucha lugareños vivían directa o indirectamente de la caza de animales como el yacaré, ciervo, lobo o carpinchos. Esta decisión de preservar el área hizo que los antiguos cazadores - llamados mariscadores - fueran incorporados como guardaparques actividad que se vio favorecida por el potencial turístico de la zona.